ANDREA L

Conocí a Camilo hace algunos años y durante este tiempo pude conocerlo un poco como persona y parte de su trabajo.  Supe que estaba trabajando en un proyecto llamado «Censurado» el cual me llamó mucha la atención ya que me parecía genial el concepto y la visión artística del mismo. 
Viendo un poco de su trabajo fotográfico y lo cuidadoso y artístico que se reflejaba en cada fotografía decidí querer ser parte de esto. 
No voy a negar que tuve miedo al principio, mi cabeza creaba muchos pensamientos llenos de mis inseguridades más profundas con el miedo constante de no ser «perfecta» y con los pensamientos que rodeaban mi cabeza al pensar Que dira mis amigos, conocidos y familia? sentirme expuesta y sobre todo a mostrarme completamente desnuda ante una persona que no conocía a profundidad. 
Definitivamente hacer esta sesión era algo que necesitaba, mi autoestima estaba dañada en esa etapa de mi vida, ya que había salido unos meses antes de una relación violenta que marcó mi vida de una manera muy dura y dejo cicatrices terribles. 

Hablar con Camilo fue muy importante antes de iniciar esta aventura, el aclaro muchas de mis  dudas y noté lo importante que era este proyecto para el y que significaba más que solo captar cuerpos «bonitos»  sentí la honestidad de sus palabras y esto me ayudó afirmar mi decisión de querer hacerlo. 
Así que no tenía dudas y algo dentro de mi me decía que estaba segura que Camilo era la persona correcta para hacer esta sesión. 
Al llegar a su estudio debo de admitir que estaba nerviosa y emocionada, platicamos un poco, todo el tiempo fue muy respetuoso y me sentí cada vez más cómoda y segura. Poco a poco fue desapareciendo los nervios, al momento de despedirme de la ropa e iniciar la sesión fue increíblemente liberador, me ayudó a identificar mis inseguridades y ver que realmente mi cuerpo era justo como debe de ser. 

Por primera vez me sentí libre de vergüenza y de prejuicios, jamás imaginé que al quitarme la ropa lograría quitarme estos estereotipos de mi cabeza de lo que representa un cuerpo «bonito» simplemente pude sentirme libre y me atrevo a decir que hasta olvide que estaba desnuda.  Fue una sesión sumamente fácil, me sentí libre de posar como quería y de  jugar de mil formas tanto  con mis hulas y con  accesorios. Puedo decir que estás fotografías marcaron un antes y un después en mi vida y me hicieron una mujer menos insegura de mi cuerpo, logre quitarme vergüenza y sobre todo logre ver lo hermosa que podía ser tan solo siendo yo misma sin tapar ni quitar ni poner nada en mi cuerpo. 

En 2018 fue mi primera sesión junto a Camilo con fotografías realmente hermosas.


2020 durante el confinamiento a pesar de la pandemia mundial logramos hacer nuestra segunda sesión con resultados realmente preciosos. 

Definitivamente admiro el trabajo y sobre todo el ser humano tan hermoso que es Camilo. 
Agradezco esta experiencia y sobre todo agradezco lo profesional y el ambiente seguro que logra generar en cada sesión.